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Tú sumisa, una gatita sexual..

Tú sumisa, una gatita sexual.. DESTACADA
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A medida que vamos explorando el mundo de la sexualidad como sumisos, nos percatamos de que hay más roles que los cotidianos Dominante y Sumiso, roles con los que podemos identificarnos y sentirnos más a gusto, según nuestras preferencias.

Además de encontrar personas que compartan estas preferencias y que forman una comunidad de amigos. En muchas ocasiones en normal que las personas se sientan raras porque creen que nadie más comprarte sus gustos, pero no debe ser así, el problema radica en que estamos conviviendo con la comunidad equivocada.

Hoy en día hay una diversidad de roles con muchas personas que lo comparten, siempre habrá gente con gustos similares.

Las sumisas sexuales.

Tú sumisa, una gatita sexual..

Estas sumisas no tienen ningún tipo de tabú sobre el sexo y disfrutan practicándolo sin preocupación, y concediendo el control a su amo durante el sexo o juegos eróticos. Tal vez el concepto se puede definir como el concepto más propio que se tiene sobre la sumisión. La diferencia radica en que cada una establece y comparten sus gustos y limites

Las sumisas sadomasoquistas.

Tal como un lo indica su nombre, estas sumisas disfrutan el sexo y el dolor. También suelen tener afinidad por el maltrato, tanto físico y verbal, la humillación y tortura, por esto no necesariamente su placer va ligado al sexo aunque la mayoría de las veces estos están unidos y prefieren como su dominante ideal a un sádico

Sumisas Bunnies o de cuerdas.

Estas son las que representan la letra “B” dentro de la BDSM, llamadas “Rope Bunnies” o en español Sumisa de Cuerdas, su nombre define muy bien sus preferencias, a estas les encanta ser amarradas. La mayoría afirma que les excita estar inmóviles y ser atadas por su dominante, por lo que conceden totalmente en control de su cuerpo para su placer, y el contacto de la piel con las cuerdas les resulta muy excitante.

Para esta categoría el dominante que está encargado de atarlas, es llamado Rigger, de igual forma y como en las demás prácticas de BDSM, es muy importante la seguridad de la sumisa, y debido al riesgo una regla vital es jamás dejar atada y sola a la sumisa.

Las esclavas sexuales

Las esclavas llevan la sumisión a su máximo nivel, y les gusta destacar entre las demás, por lo que les gusta ser llamadas siempre esclavas y no sumisas. Su nivel de entrega, y compromiso dentro del erotismo es increíblemente alto, y no significa un sacrificio sino placer.

Diferencias entre esclavo y sumis@

Tú sumisa, una gatita sexual..

Hay detalles muy sutiles que diferencian a las esclavas de las sumisas y también características muy notorias en su motivación y el compromiso que tienen.

Principalmente los esclavos son más extremistas, en ningún momento esperan que su dominante muestre piedad y eso les gusta, mientras que las o los sumisos se inclinan por la compasión que muestre su amo mientras los castiga.

Aquí podemos ver la diferencia que ambos presentan, algunas personas se atreven a probar la experiencia con ambos papeles, y bajo su consentimiento se entregan a la voluntad del dominante, que determina como serán las cosas por que los esclavos no establecen límites. No siempre tendrá que abandonar su voluntad totalmente.

Como pasa en cualquier relación debe existir un equilibro, por lo que más allá de existir abuso y agresión, pero en la mayoría de los casos esta suele ser progresiva o de manera ocasional, debido el fin es el disfrute de ambos, hasta llegar a una sumisión completa.

Para concluir…

Tú sumisa, una gatita sexual..

Podemos ver como una sumisa es feliz al satisfacer a su amo, pero esto no determina su felicidad, mientras que una esclava con experiencia solo será feliz complaciendo en su totalidad las reglas, condiciones, y actos que su amo decida.

Por ejemplo: si el amo decide tener relaciones sexuales con otras personas una sumisa podrá decidir si acepta e incluso modificar la situación para su máxima satisfacción o morbo, mientras que una esclava solo se digna a obseder órdenes y no decide la situación, pero es algo que le hace feliz y disfruta obedeciendo a la dominante siempre.

Es importante señalar que siendo esclavo puedes decir salir de la relación que estas llevando, y aunque es claro que los esclavos soportan y aumentan la tolerancia mucho más que los sumisos, estos pueden abandonar la relación si no está resultando como ellos quieren, en especial si por alguna condición no pueden diferenciar la ficción de la vida real.

Así que marcar este límite es crucial. Siempre será importante la salud del sumiso y el esclavo así que el amo debe velar por su bienestar.