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La sumisión. Guía y consejos

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 La sumisión, es una actitud espontánea y natural en algunas personas, pero dentro de la cultura BDSM, la sumisión se refiere a una disposición erótica hacia la renuncia del control sobre sí mismo.

La sumisión puede adquirir diferentes formas y gradaciones. Es un acto personal, y como tal, es personalizado.

Los sumisos, dentro del BDSM son la contraparte de los dominantes o dom.

Pero…

¿Qué es un sumiso o sumisa?

Es la persona que decide ceder el control de los estímulos erotizantes dentro de la sesión de BDSM.

Esta cesión del poder, es consensuada y representa para el sumiso o sumisa, una forma singular de sentir placer y satisfacción sexual.

Cuando la persona que desarrolla el rol de sumiso otorga el poder a su dom, lo hace de forma voluntaria, previa negociación de los parámetros.

En este sentido, cabe aclarar que los aspectos sobre los cuales cede control suelen ser muy variados.

Es decir, dependiendo del tipo y nivel de la sumisión

Conocer las categorías de la sumisión, ofrece una excelente guía para la sumisión perfecta.

Por lo tanto, a continuación se presentan los tipos más comunes de sumisión, y los diferentes niveles que desarrolla el dominante sobre su contraparte.

Categorías más habituales de la sumisión

1.- La Sumisión Convencional

Categorías más habituales de la sumisión

Este estilo de la sumisión, está enmarcado en la complacencia hacia el dominante, en la cual radica la satisfacción sexual y mental, a nivel personal.

Las expresiones de satisfacción de su dom, le llenan de gratificación erótica.

Este tipo de sumisión, responde a las órdenes o actividades establecidas por su dominante  o amo.

Aceptan de buena manera los castigos, vincula el placer sexual con el dolor, aunque no es masoquista.

Por tal motivo, sus límites de tolerancia al dolor tienden a ser bajos en relación con la sumisión masoquista.

Contrariamente, la humillación es recibida con mayor agrado y proporciona mucha excitación psicológica.

Este tipo de sumisión, puede perdurar fácilmente en las relaciones 24/7.

Es uno de los juegos de D/s que más se desarrollan entre parejas estables.

2.- Sumisión  sexual o de alcoba

En estos casos, la dominación se ejerce sólo durante el acto sexual.

Por lo cual, el sumiso o sumisa solo renuncia al control durante la relación, incluyendo el preámbulo o juego previo.

Al culminar el encuentro íntimo, el equilibrio de poderes se restablece invariablemente.

sexual o de alcoba

Como detalle primordial, dentro de la sumisión de alcoba, el sumiso o sumisa le otorga prioridad a la satisfacción sexual de su compañero.

Esta categoría se confunde a menudo con el sexo rudo. Sin embargo este último detalle establece la diferencia entre ambos.

3.- Sumisión masoquista

Es cuando la parte sumisa obtiene su máximo disfrute de los castigos y sus necesidades se enfocan más en este aspecto que en la realización sexual.

La sumisión masoquista busca el dolor como fuente de placer por encima del goce erótico.

Prefieren la humillación, la tortura y las degradaciones.

Su dominante preferido es el sado pues cumple sus deseos de mejor manera.

Este tipo de sumisión es compatible con una gran resistencia al dolor físico.

Dentro de esta categoría, no existe la necesidad de servir y obedecer al amo, el sumiso o sumisa obedece a sus propias motivaciones.

De alguna manera este tipo de sumisión no cede el control totalmente, pues la persona que actúa como sumisa, provoca o manipula las reacciones necesarias en su contraparte para recibir el dolor que desea.

4.- Sumisión Rope Bunnies

Sumisión Rope Bunnies

Quien se siente definido dentro de este tipo de sumisión elige el bondage como manera de abandonar el control.

La sola inmovilización, genera placer psicológico. En este sentido, cabe destacar que este tipo de sumiso no abandona voluntariamente el control.

La simbología de las cuerdas define que el control le es arrebatado y en eso basa su excitación erótica.

Su dominante ideal es el rigger, este tipo de dom disfruta plenamente atando a su pareja.

5.- Sumisión servil

Esta tipología de sumisión, se desarrolla en actividades de servicio al dominante. Incluye todas las acciones necesarias, requeridas o no, para el placer del dom.

El placer en este tipo de sumisión nace del servicio. La gran variedad de acciones que se ejecutan dentro de esta categoría hace que limitarlas sea difícil.

Puede abarcar desde actividades domésticas como limpiar y arreglar el espacio hasta lamer sus pies o ejecutar diferentes servicios sexuales.

Este tipo de subordinación es muy frecuente entre parejas estables, y al igual que la sumisión convencional suele emerger en el juego de Dominación y sumisión catalogado como 24/7.

Dentro de los juegos de BDSM, la sumisión es un elemento esencial, pues sin este rol, los juegos de D/s serían imposibles.

Sin embargo, así como existen tipos categóricos de sumisión, también hay características dentro de los juegos de dominación que dan origen a una tipología específica de sumiso.

 

Tipos de sumisión según el juego

Sumisos “little”

Estas personas, adoptan la sumisión mediante roles relacionados con el fetiche del Age play. Es decir su conducta y posturas suelen imitar la de personas de poca edad. Pueden ser adolescentes o niños pequeños.

La contraparte, es el dominante daddy. Este, ejercerá el control desde la perspectiva del adulto.

Los castigos suelen ser suaves y picarescos.

Sumisos pets

Este tipo de relación establece que la sumisión responde al dominio que se ejerce sobre las mascotas.

Sumisos pets

Los sumisos en este caso, adoptan la conducta de un animal. Existe mucha variedad dentro de este tipo de juegos.

De tal modo, la sumisa o sumiso puede ser una kitten o un pup. Las actitudes de dominio suelen ser más extremas cuando se refiere a los pony plays.

Sumisos Prey

Este juego presenta similitudes con el anterior, en la personificación del rol sumiso. Al igual que el anterior, se asumen actitudes de una nimal.

La diferencia estriba, en que dentro de los juegos prey, la parte sumisa es “cazada” por el dominante, que a su vez asume el rol de depredador.

Para este juego, se suelen utilizar espacios abiertos, que le confieren mayor realismo.

Sumisos de cuadra

Esta categoría, otorga a la sumisión vinculaciones con el poliamor.

Esto se debe a que en esta categoría de sumisión, los sumisos o sumisas conviven con un dominante bajo el mismo techo.

Esta práctica del BDSM, comparte ciertos límites con la poligamia.

Dentro de este esquema de sumisión, existen otros roles, como los alfa, que mantiene un lugar privilegiado en la relación.

Sumisos Sissy

Sumisos Sissy

Esta categoría se refiere solo a los caballeros. Consiste en la sumisión mediante el travestismo.

Es decir, los sumisos asumen las conductas y vestimentas propias de una fémina.

¿Sumisión o esclavitud?

Aunque a menudo suelen confundirse, estos vocablos, dentro del BDSM poseen connotaciones distintas.

Las diferencias entre ambos niveles, se localizan a partir de detalles mínimos, pero de gran importancia.

Las diferencias más notorias están en la actitud. El sumiso participa en la elección de castigos y establece ciertos límites dentro del juego.

El esclavo, no suele apelar a la piedad del amo, por el contrario, asume sus castigos de forma estoica.

Los sumisos, juegan a ser dominados y pueden evitar un castigo asumiendo actitudes graciosas o lúdicas.

Ambos son niveles de sumisión, pero el esclavo no tiene libertad para fijar límites, se abandona completamente al dom.

Esto no significa que se obvien los principios de seguridad y consenso.

Es más bien una especie de acuerdo tácito sobre los que está permitido, pero el aspecto seguridad recae sobre el amo propiamente.

Aunque exista un contrato previo, el esclavo o esclava restringe sus propios deseos en beneficio del placer de su amo.

Otra diferencia surge de la complacencia, el sumiso recibe satisfacción dentro de los juegos. Esta, puede traducirse en caricias, pequeños juegos sado o el orgasmo.

Una diferencia muy notable es el uso de vocablos, los sumisos tiene un dominante o dom, los esclavos poseen amos.

Para comprender mejor estas diferencias, se debe tomar en cuenta que ambos son extremos de un mismo juego.

En otras palabras, son niveles distintos pero entre ellos, se encuentran varias gradaciones, las cuales se explican a continuación:

Los niveles de la sumisión

1.- El sumiso no esclavo

Corresponde a las personas que no desean jugar a la esclavitud sexual.

Estos prefieren los juegos de roles más inofensivos. Por ejemplo los escenarios en los cuales haya componentes de violencia y humillación muy ligeros.

Generalmente tiene gran participación en el diseño y reglas del juego.

2.- El sumiso temporal o esclavo love plays

Esta categoría incluye las personas que aceptan el dominio del amo solo dentro de un juego temporal.

Lo más probables es que tome parte activa en la dirección del juego.

Puede efectuar actividades de servicio y obediencia, pero establece y modifica los límites según sus prioridades eróticas.

Suelen ser fetichistas. Por ejemplo, pueden participar en una sesión de trampling, indicando cómo y dónde quieren ser pisoteados.

3.- Sumiso total no esclavo

Sumiso total no esclavo

La sumisión es verdadera y absoluta, pero conserva sus límites, aunque son muy pocos.

Se satisface mediante la entrega del control sin abandonar su propia necesidad erótica.

En otras palabras, disfruta del uso que se le da a su cuerpo, de los castigos y el bondage dejando que su dominante dirija la sesión.

No obstante no renuncia a su propio placer, por lo que se distingue claramente del esclavo.

4.- Esclavo a corto plazo

Estas personas van un poco más allá del esclavo de juegos. Dedican todo su servicio erótico y sensual a su amo. Sin embargo, la duración de la esclavitud depende de la duración del juego o sesión.

No coloca límites, pero se circunscribe a arreglos temporales.

Usualmente, la ejecución del rol de esclavo depende de su estado anímico u otras prioridades.

No se compromete incondicionalmente con la esclavitud.

5.- Esclavo por jornadas

Comparte las características del nivel anterior, con un poco más de compromiso con respecto al tiempo.

Pero, en contraste, obedece y complace en todos los aspectos de su vida cotidiana.

No suelen abandonar sus actividades, pero priorizan la satisfacción de su amo.

Dedican el tiempo libre a la relación D/s. puede desarrollarse entre parejas estables.

6.- Esclavo total

Este nivel de la sumisión se encuentra con mayor frecuencia en relaciones estables. Aunque tiene más tendencia a desarrollarse en organizaciones sectarias o cultos religiosos.

Está considerada como resultado del lavado cerebral, situaciones de presión extrema sobre la persona o disfunciones emocionales.

En este nivel no existen los límites en ningún sentido. Ciertamente, dentro del BDSM, esta relación es utópica.

Guía y Consejos para la perfecta sumisión

Consejos para la perfecta sumisión

1.- Ser sensato y sincero, de esta forma, podrá colocar los limites necesarios para disfrutar de la relación.

2.- Abrir la mente y olvidar los prejuicios. De esta forma, se acogen con mayor agrado las órdenes de dom o amo.

3.- Mostrarse atento y respetuoso.  De esta forma despertará el agrado y será valorado ampliamente.

4.- Desarrollar la paciencia, saber esperar y encontrar los momentos ideales para complacer.

5.- Mantenerse aseado y listo para agradar visualmente.

6.- Escuchar y conocer a su dominante o amo. Así podrá anticiparse a sus deseos.

7.- Demostrar adoración y admiración.

8.- No cuestionar, discutir ni desaprobar los deseos del amo.

9.- Guardar silencio. Un buen sumiso calla y obedece.

10.- Reconocer que su obligación es servir y satisfacer.